Por primera vez, el evento que hace 10 años se realiza en diferentes países de Latinoamérica con el objetivo de evidenciar las amenazas que más aquejan a la región se desarrolló de forma virtual debido a las medidas de aislamiento social.

Como todos los años, la décima edición del ESET Securiy Days contó con la presencia de expertos en ciberseguridad, quienes, además de mostrar la preocupante situación en la que se encuentran algunos países de la región, realizaron demostraciones de cómo identificar amenazas que podrían comprometer las actividades de una empresa.

En el marco de estas conferencias, se compartieron los resultados del último ESET Security Report, un estudio en el que participaron mas de 3,000 profesionales de diversas organizaciones de la región y que recoge las principales tendencias que se muestran en Latinoamérica en términos de ciberseguridad.

Países de Latinoamérica con más ataques de malware

De acuerdo con los resultados de la investigación, más del 50% de compañías latinoamericanas sufrió al menos una infección por malware. Entre los países con más porcentaje de empresas infectadas encontramos a México con 72%, Perú con 71% y Paraguay con 67%, seguidos por Ecuador (65%), Guatemala (63%) y Argentina (60%).

Un panorama que pone en alerta a los profesionales de la seguridad, quienes, según el reporte, manifiestan que sus principales preocupaciones son: el acceso indebido, el robo de información y el código malicioso.

Por otro lado, se reveló que existen actores maliciosos dedicados a generar campañas específicas de malware para comprometer a organizaciones latinoamericanas. Las herramientas de telemetría de ESET detectaron una botnet de minería de criptomonedas llamada Victory Gate dirigida especificamente a usuarios de Perú. Un malware que logró comprometer, como mínimo, a 35,000 dispositivos a través de dispositivos USB.

Del mismo modo, se descubrió que la campaña de espionaje deribado del código maliciso llamado Machete tuvo su foco principal de ataque en Venezuela, Ecuador, Colombia y Nicaragua. También se detectó que el troyano bancario Mekotio tenía como objetivo principal a usuarios de Chile y Argentina.

Ataques que aprovechan la coyuntura por COVID-19

Los informes de ESET también indican que los ataques de ransomware y spyware disminuyeron en los últimos años; sin embargo, los ataques son mucho más dirigidos y apuntan a organizaciones. El 70% de los ataques de ransomware están dirigidos a pequeñas y medianas empresas (Pymes).

“Los cibercriminales analizan una organización, ven qué información pueden cifrar y hacen un ataque dirigido donde puedan solicitar más dinero por el rescate de sus archivos”; explicó Cecilia Pastorino, Security Researcher de ESET Latinoamérica.

Según la especialista, el dinero que los cibercriminales solicitan, en promedio, en un ataque de ransomware, es de 10 mil dólares.

Debido al panorama que se vive actualmente a nivel global, en los últimos meses, los ciberdelincuentes están dirigiendo sus ataques hacia instituciones que juegan un rol clave en la lucha contra el coronavirus. De acuerdo con la compañía de seguridad informática, el 43% de los ataques de ransomware son dirigidos a instituciones de salud, como hospitales y clínicas.

Entre los países con mayor detección de ataques ransomware en el último año, encontramos a Perú, con poco más del 20% del total de las detecciones, seguido por México con 14% y Brasil con 12%.

Los resultados del informe State of the Phish 2020 indican que el 88% de estas amenazas se propagan a través de Spear Phishing y Macromalware (20%).