Stuxnet es un gusano informático que afecta solo a equipos con el sistema operativo de Microsoft Windows. Fue descubierto en junio del año pasado por VirusBlokAda, una empresa de seguridad radicada en Bielorrusia.

Stuxnet, es un gusano que espía y reprograma sistemas industriales, sistemas SCADA de control y monitorización de procesos, está pensando  para afectar a infraestructuras como centrales nucleares, y es capaz de reprogramar controladores lógicos programables, además de ocultar los cambios realizados. Stuxnet incluye un rootkit para sistemas reprogramables PLC.

The New York Times, recientemente publicó un informe refiriéndose a Stuxnet como el Hiroshima de nuestros tiempos, una guerra cibernética en una escala jamás conocida.

Lo curioso del asunto es que la Seguridad Nacional y los Organismos de lucha contra el terrorismo y profesionales han evitado escribir sobre Stuxnet en el pasado por razones desconocidas.

La clave para el buen funcionamiento de cualquier gobierno en el escenario mundial es la necesidad de ser conscientes de las intenciones de otros actos hacia su nación. Es por eso que todas las naciones tienen sus propias agencias de espionaje.

Una combinación de inteligencia humana y ELINT (inteligencia electrónica), que puede ayudar a una nación a construir una imagen aproximada de las amenazas inminentes hacia el país.

Todos podemos imaginar el peor de los casos de amenazas inminentes. Los terroristas podrían tener armas nucleares, biológicas o armas químicas, y estar a punto de liberarlas. En esa situación, un ataque preventivo es más que justificado. Eso, por supuesto,  asumiendo que la información de inteligencia sea correcta, lo cual no siempre es así.

Según el artículo del New York Times, Stuxnet se utilizó y fue un éxito, la maquinaria nuclear estuvo fuera de línea debido a Stuxnet, que ocasionó daños físicos a los mecanismos.

Stuxnet es efectivamente el Hiroshima de la era digital. Desafortunadamente, con la carrera de armamentos nucleares, el virus probablemente pondrá en marcha una carrera de armas virtuales entre las naciones.

No estoy diciendo que Stuxnet y sus secuaces son capaces de explotar las ciudades y pueblos. Por el contrario, el lanzamiento de Stuxnet es un hito en la militarización, el alumbramiento de una nueva era, y el tipo de arma que tendrá un efecto profundo en el arte de la guerra de nuestra era digital.

Muchos lo han llamado el hermano menor de Skynet, de la ficción a la realidad, un virus con inteligencia propia, que podría luego ocasionar el tan mencionado Apocalipsis.

Por desgracia, las armas virtuales son mucho más fácil de crear e implementar que las armas nucleares. Debido a que el costo de desarrollo de armas digitales es increíblemente barato. Casi cualquier nación, grupo de interés, grupo terrorista, o adolescente que vive en el país puede desarrollar y desplegar sistemas de armas virtuales.

Esta ubicuidad representa la mayor amenaza que ha tenido el mundo desde su creación. Mientras Stuxnet se desplegó por un motivo justificado (así nos quieren hacer creer), y puede hasta haber salvado vidas, las armas virtuales pueden tener como objetivo a determinados enemigos, para que ejecuten determinados procesos, y silenciosamente.

Estamos en guerra, esta vez no habrán disparos, misiles, tanques... la guerra es virtual.

Fuente: Zdnet