Una tras otra, las ceremonias siempre se preocupan por ser bien planeadas como realizadas. Su eficacia y atención al detalle son impresionantes.

Sin embargo, después de presenciar una serie de ceremonias japonesas, un investigador  podría encontrarlos algo obsesionados.

Más que nada por falta de espontaneidad y carácter. Pero cuidado, si estás invitado a la boda y te encuentras pensándolo, no has visto nada aún: la boda planificada en el iPad ya está aquí.

La mayoría de las parejas japonesas de hoy prefieren los vestidos blancos de novia y ceremonias occidentales,  de estilo cristiano - no necesariamente con cualquier elemento religioso - a los rituales sintoístas más tradicionales, donde resaltaba el traje especial del kimono. Según una encuesta realizada este año por la revista de bodas Zexy, informó que el 60% de las parejas se casaron en una ceremonia cristiana de estilo, mientras que sólo el 17% fue por el estilo tradicional Shinto.

No obstante, mientras que son de estilo para parecerse a las bodas occidentales, la similitud se detiene allí. Los clientes, cuando llegan, ofrecen dinero como regalo a la pareja que se les permita el lugar de la boda recibiendo un pequeño regalo a cambio cuando se van.

El principal partido - hay otros acontecimientos, más privados en el día - casi siempre cuenta con largos discursos y una presentación de diapositivas de producción profesional de vídeo o la presentación de la pareja desde su niñez. Algunos incluso cuentan con ceremonias occidentales al azar con personas que son contratadas a tiempo parcial para vestirse como sacerdotes y realizar rituales en la boda.

Fuente: The Wall Street Journal