Fue terrible lo que pasaron las personas en Haiti, ese terremoto de hace pocos días nos sorprendió y conmovió a todos. Las cifras de pérdidas humanas fueron astronómicas.

Lamentablemente, nos hemos enterado que hace poco han vuelto a suceder terremotos en Puerto Príncipe la capital del país caribeño.

De hecho, en el primer gran terremoto, el de 7.3 en la escala de Richter, hubieron personas de otros países, que también sufrieron esos momentos y que tienen una historia que contar, la historia que probablemente no quería jamás vivir, pero que nos confirma que la tecnología está aquí más que para solo entretenernos.

Dan Woolley, cineasta americano, estaba en Puerto Príncipe, realizando un documental que trataba sobre la pobreza en Haití, donde fue sorprendido por el gran terremoto, mientras él se encontraba en su hotel, quedando sepultado entre los escombros de todo a su alrededor.

Estando bajo todo, según sus propias palabras, clamó a Dios, pidiendo salir de ese lugar y volver con su familia. Posteriormente, Dan Wolley, con su iPhone y una cámara réflex, pudo iluminar un poco el espacio que tenía alrededor, llegando hasta el interior de un ascensor, para de esta forma estar a salvo.

Luego, le fue de mucha ayuda seguir las indicaciones de una aplicación de primeros auxilios que tenía en su iPhone, logrando vendar su pierna y detener la hemorragia de una herida en su cabeza.

La aplicación de su iPhone le informó sobre la posibilidad de entrar en shock. Luego de 65 horas, la historia termina con final feliz, al entrar un equipo de rescate en la zona donde estaba Dan Woolley.

Usemos la tecnología, más que para entretenimiento, para que nos sea de utilidad.