Independientemente de quién fabrica un dispositivo electrónico, para venderlo en los Estados Unidos ya ha pasado una serie de pruebas estrictas de seguridad.

Eso significa que puede comprar y utilizar el dispositivo con el conocimiento de que no va a hacernos daño. Lo que esas pruebas no garantizan es que el dispositivo continuará trabajando cuando esté dañado.

Un par de niños jugando con su iPod Touch han reforzado el hecho de que si un dispositivo está dañado, no se debe poner en cualquier lugar cerca de su persona.

Mientras que uno filma, el otro niño empieza a hacer experimentos para destruir el iPod Touch. Primero le pasan un monopatín, que por cierto no le hace nada al dispositivo, luego lo dejan caer de un techo, y tampoco se hace nada, pero luego viene el salvajismo y es golpeado con un bate. Sí, eso sí funciona.

Pero no contento con ello lo golpea repetidamente con el bate de beisbol hasta que explota, en serio, no es broma, no se pierdan el video que para los que son adictos a destruir cosas les parecerá una verdadera joyita.

Fuente: Geek