Entre las muchas características difíciles de la enfermedad del Alzheimer es que los médicos nunca pueden decir con certeza que los pacientes que muestran signos de pérdida de memoria van a desarrollar la enfermedad neurodegenerativa.

Eso es porque no todas las personas que presentan fallas en la memoria necesariamente tienen la enfermedad de Alzheimer. Incluso las personas que tienen niveles más altos de la proteína amiloide que obstruye el cerebro, el sello distintivo de la enfermedad, no necesariamente es desarrollada.

Pero en un último estudio sobre la detección de biomarcadores tempranos de la enfermedad del Alzheimer, un grupo internacional de científicos redactó en un informe que una combinación de pruebas podría predecir si es que las personas desarrollarían esta terrible enfermedad.

Los investigadores se centraron en 58 pacientes con deterioro cognitivo leve (MCI), una condición que incluye lapsos de memoria y períodos de confusión que son más severos que los de la tercera edad, que vienen con el envejecimiento, pero no lo suficientemente grave como para calificarlo como demencia.

Alrededor del 15% de estos pacientes que tienen MCI llegaran a desarrollar la enfermedad de Alzheimer. La pregunta es, ¿cuáles?

Antes de que los médicos puedan comenzar a utilizar la nueva prueba, estos hallazgos deben ser confirmados en otros pacientes con DCL. Si son validados, puede ser útil para ayudar a aquellos que están en mayor riesgo de desarrollar Alzheimer para comenzar las intervenciones que puedan retrasar la progresión de la enfermedad.

Los estudios han demostrado que mantenerse socialmente y físicamente activo puede ralentizar el deterioro cognitivo que se produce una vez que el amiloide comienza a interferir con la función normal del nervio en el cerebro.

El estudio fue publicado en la revista Neurology.

Fuente: Healthland