La combinación de la vulnerabilidad a los terremotos y una afinidad natural para la robótica ha llevado a los robots a ir al rescate de los japoneses.

Aunque el terremoto que azotó la costa este de Japón el día de ayer ha dejado al país con una destrucción masiva y cientos de muertes, la tecnología moderna y el nivel impresionante de Japón en la preparación por estas catástrofes está ayudando a los sobrevivientes a amortiguar el daño tanto como sea posible.

En el futuro, nuestra capacidad para hacer frente a los desastres naturales no hará sino aumentar, debido en gran parte a las áreas especialmente vulnerable a terremotos, especialmente en Japón (y en menor medida, California).

La predicción de terremotos sigue siendo un notable esfuerzo inútil, los sismólogos no son capaces de predecir de forma fiable el que un terremoto ocurra.

Así que el trabajo realizado para mitigar los daños causados ​​por los terremotos está a menudo en las tácticas del sismo después de la búsqueda y rescate. Curiosamente, dos de los lugares más propensos a terremotos en el mundo son también dos de los focos del mundo de la ingeniería robótica.

Japón está situado en la llamada Cuenca de Fuego del Pacífico, en el punto del Pacífico donde chocan las placas tectónicas euroasiáticas. El país está siempre en peligro de terremotos masivos, y como potencia tecnológica mundial, es el único capaz de crear robots, no para combatir terremotos, sino para ayudar a las víctimas.

Fuente: Popsci