Durante el transcurso de las  tres carreras de la competencia hípica de la Triple Corona, las posibilidades de que uno de los caballos termine con una lesión que acabe con su carrera deportiva definitivamente son de 1 a 10.

"Ortopédicamente hablando, los caballos son bombas de tiempo que esperan un desastre inevitable", dice el veterinario Bob Harman. "Son demasiado grandes, pues tienen un cuerpo de 450 kg sobre unas patas frágiles que más parecen mondadientes en comparación al volumen del cuerpo del caballo, además que están trabajando al límite de su capacidad".

Harman también es CEO de la compañía Vet-Stem, que se encarga de tratar caballos de carreras con terapia de células madre. Desde su fundación en 2002, Vet-Stem ha tratado a más de 4,141 caballos por problemas como tendinitis y lesiones musculares, y afirma que del 70 al 80% de estos se ha recuperado completamente.

Los doctores generalmente reservan esta terapia de células madre, que se basa en la habilidad única para regenerar y formar cualquier tipo de tejido, para pacientes con problemas más complicados, como cáncer y lesiones en la columna vertebral. Pero ahora se estaría estudiando la posibilidad de aplicar dichos tratamientos a pacientes humanos con problemas similares.

"Cuando un jugador del Super Bowl se rompe un ligamento, sufre el mismo proceso por el que pasa un caballo", indica Harman. "La estructura básica de tejido en las piernas de ambas especies es muy similar", añade.

Por otro lado, Sean Owens, otro veterinario, está aplicando sus propias pruebas de rehabilitación mediante células madre en caballos. Estas pruebas han sido diseñadas con miras a ser usadas en humanos, y hasta el momento han rendido resultados al ser aplicadas en caballos. "Con las pruebas realizadas en caballos exitosamente, ahora podemos apuntar a hacer las pruebas con humanos," informó.

Fuente: popsci