Recientemente hemos oído cómo Netflix y su servicio de streaming de vídeo es ahora la mayor fuente de tráfico de Internet, y estos servicios acaban de comenzar. Por eso es reconfortante saber que la velocidad a la cual los datos se pueden transferir por un pedazo de fibra óptica pueden escalar a terabits.

Los investigadores del Instituto de Tecnología de Karlsruhe en Alemania han conseguido crear un nuevo registro mediante el envío de datos por fibra óptica a una velocidad de 26 terabits por segundo.

Que en realidad puede parecer muy lento si tenemos en cuenta que el Instituto Nacional de Información y Comunicaciones (NIIC) en Tokio logró 109 terabits por segundo a principios de este mes. Pero la técnica de Karlsruhe ofrece una gran ventaja sobre los otros, mayores tasas de transferencia se han logrado y es relativamente barato de implementar.

El método NIIC requiere un nuevo tipo de cable, y los anteriores han requerido cientos de láseres caros y grandes cantidades de energía para lograr hacerlos viables para la mayoría de nuestras redes de comunicación de todo el mundo.

El profesor Wolfgang Freude, surgiere que con este nuevo método, logró alcanzar las velocidades del terabit utilizando un solo láser. Que el láser dispara pulsos muy cortos de luz de diferentes colores. 350 colores diferentes son posibles en total, cada una de ellas puede llevar a un flujo de datos. En el extremo receptor óptico se puede separar los pulsos de color diferente y por lo tanto los datos, teniendo en cuenta tales enormes transferencias de datos a través de una sola línea.

Los aspectos más importantes de esta nueva forma de transferencia de datos es su habilidad para trabajar con la infraestructura existente de cable y de bajo coste comparable cuando se compara con los métodos alternativos de transferencia de terabits.

Fuente: Geek