Perder un ojo debe ser terrible, pero las cosas para Rob Spence no han sido tan malas luego de perder uno de sus ojos. Rob es un cineasta de 37 años de edad que tiene una cámara que registra todo lo que ve y se encuentra dentro de su prótesis.

Rob sufrió un accidente cuando era pequeño y estaba de caza, por eso pasó varios años trabajando en su proyecto Eyeborg con un equipo de ingenieros para crear el implante único que se transmite en forma inalámbrica para que pueda ver lo que aparece en la pantalla de un ordenador. Así que convirtió su prótesis en un ojo biónico.

En declaraciones a Sky News, Rob comenta: "No fue fácil... Los ingenieros se divertían mucho y no había un presupuesto para hacerlo, por lo que era divertido el proyecto para estos chicos". Rob también piensa que la gente va a tener la opción de tener partes del cuerpo desarrolladas para hacer más actividades que las que actualmente hacemos.

Fuente: Asylum