En el primer caso, el hackeo del sistema es totalmente legal porque el propio Google es quien autoriza mediante su programa de recompensas "Android Security Rewards" que hackers de todo el mundo vulneren su seguridad a fin de que la compañía pueda corregir todo error y mantener a salvo a sus usuarios.

En el segundo caso, cibercriminales afirman haber hackeado millones de cuentas en Facebook y que en las próximas horas venderán esta información. Veamos los detalles a continuación.

Google paga aún más a hackers que vulneren Android

Al ser Android el sistema operativo para móviles más difundido y utilizado alrededor del mundo, los errores de seguridad impactan a millones de personas y sería caótico no contar con una solución rápida; para evitar esto, Google por medio de su programa "Android Security Rewards" pagó el año 2015 en total $550.000 USD a 82 hackers que revelaron a la empresa las fallas de seguridad que encontraron en su sistema operativo.

Google conoce que la seguridad es imprescindible para mantener su hegemonía, por ello han anunciado que aumentarán hasta 50% más dinero a aquellos que contribuyan con mejorar la seguridad de Android.

Para que esto último se cumpla, los bugs o errores de seguridad encontrados deberán ser considerados como graves y el hacker deberá proponer una solución para el mismo.

Desde el siguiente enlace podrán participar y conocer más sobre el programa de recompensas de Android.

Cibercriminales afirman haber hackeado millones de cuentas en Facebook

Tal como sucedió con servicios grandes como LinkedIn, Tumblr, MySpace e incluso la famosa red social rusa Vkontakte, Facebook habría sido hackeada y los datos de 800 millones de cuentas serían puestos a la venta en las próximas horas.

Según afirma el hacker Tessa88, quien informó sobre las filtraciones anteriores, posee los datos de entre 500 y 800 millones de cuentas de Facebook, por las cuales pediría entre $3500-$5000 USD.

Todo apunta a que los hackers ya tenían estos datos hace varios meses y obtenían provecho de ello, hasta que recientemente deciden vender los datos producto de rencillas en el propio grupo autor del ataque.